No tengo una respuesta a mí.
Quizás porque nadie la ha necesitado nunca realmente.
Quizás porque nadie la ha necesitado nunca realmente.
Tampoco entiendo la distinción del tiempo y la realidad,
no sé cómo desmecanizar mis reacciones a estímulos pasados.
no sé cómo desmecanizar mis reacciones a estímulos pasados.
Poseo un lenguaje que nada me ayuda y un cerebro que se cree todo lo que el cuerpo le cuenta.
Todo esto nos aleja y tú ni siquiera estás aquí para verlo.
No tengo una respuesta a por qué funciono mal, a por qué siempre odio lo que amo, por qué me da asco lo que más delicioso me parece.
Por qué yo. Por qué mí.
Por qué yo. Por qué mí.
Lo que sí tengo es fuego y veneno. Sólo se activan a través del amor. Por eso el apego a lo solo y oscuro. Hallo la calma.
No quiero odiarte, así que vete.
Tampoco quiero dejar de quererte quédate...
Tampoco quiero dejar de quererte quédate...
Pero a una distancia prudente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario